2021-09-09

Camino a París 2024, Juegos Olímpicos 2024

El 6 de septiembre de 2021, la joven gimnasta Mbaiamdené Bonté se unió triunfalmente a las otras cuatro chicas que ya estaban entrenando en Madrid. De hecho, recordamos que a principios de 2020, 7 niños becados por la Fundación Ramón Grosso para los Estudios y el Deporte llegaron a España para formarse en gimnasia, karate y otros. Tras 89 meses de formación en karate, las dos chicas destinadas a esta disciplina regresaron al Chad, al igual que el joven que vino a vivir una experiencia de integración social.
Desde entonces, las otras cuatro chicas, Achta, Anne-Marie, Cecilia y Grâce, tuvieron que continuar su formación en Madrid. Un año más tarde, también llegó la quinta niña, Bonté. La joven gimnasta comienza su formación deportiva y escolar con los cuadros que su hija ya tiene en Madrid. Con este grupo de 5 niñas se completa el programa de preparación para las clasificaciones en gimnasia para los Juegos Olímpicos de París 2024.

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La Fundación Ramón Grosso y el Club de Gimnasia de Pozuelo, que entrena a estos niños, están muy contentos con la llegada del pequeño Bonté. Los padres de las chicas también están contentos de ver que la experiencia va bien para las chicas que ya están entrenando.
Para el Centro Educativo y Deportivo de la Fundación Ramón Grosso, éste es un gran motivo para dar gracias a Dios. También es el lugar para subrayar que la humanidad es una y que es necesario promover las diferentes iniciativas para la mejora de las condiciones de vida, así como las diferentes posibilidades de formación de los jóvenes a través de una colaboración entre los que tienen los medios y los necesitados.
El Centro Educativo y Deportivo de la Fundación Ramón Grosso quiere ser un puente entre culturas, entre países, entre deportes y culturas, entre otros países del mundo y el Chad. Y si la experiencia con las instituciones españolas puede ser una experiencia piloto para la formación de los jóvenes para que sean actores de la nación el día de mañana.

Durante varios años, estas cinco niñas se entrenarán como gimnastas en el Club de Gimnasia de Pozuelo, pero también estudiarán en la escuela católica. De hecho, el Colegio de los Escolapios es el que aceptó formar a estas chicas adoptando una estrategia de integración de las mismas desde el primer día de su llegada. Hoy, las niñas están tan bien integradas en su entorno escolar y social que se diría que siempre han vivido en España. Es cierto que los niños se adaptan muy rápidamente a las condiciones de vida que se les ofrecen. Y sobre todo, estas condiciones son las mejores para el proyecto olímpico diseñado por la Fundación Ramón Grosso. Las cinco niñas son acogidas por tres familias españolas en Madrid, en el barrio de Pozuelo. Todos los días tienen entrenamiento y estudios de gimnasia. Sus días de semana consisten en horas lectivas en el colegio y por la tarde en el club para entrenar. A mediodía, comen en la cantina como todos los demás estudiantes. Por las tardes están en el club y sus padres anfitriones los recogen al final del entrenamiento. El sábado es un día de trabajo personal para repasar sus lecciones, 2 horas de entrenamiento en el club. El domingo es un día de descanso. Buena inserción para estos niños y un gran agradecimiento a las familias de acogida así como a los colaboradores de la Fundación Ramón Grosso que han hecho posible esta maravillosa experiencia que están viviendo las niñas pero también una preparación de los actores de la construcción de la nación chadiana del mañana. 
Buena suerte y que tengas una buena semana.